Espero que nunca hayan pasado por una, son temidas por todos. Una lesión puede sacarte de circulación días, semanas o hasta meses.

Las lesiones ocurren generalmente por una mala ejecución, debemos siempre tener presente que al ejercitarnos con pesas, el riesgo de una lesión esta latente todo el tiempo, nuestros músculos, tendones y articulaciones son sometidos a estrés y sin el correcto manejo de los pesos podemos lastimarnos.

No es casualidad que las personas que más se lastiman son las que no visitan con regularidad el gimnasio, quizá por que no tienen una estructura en su entrenamiento o no tienen una buena técnica en sus ejecuciones, o peor aún, llegan queriendo acabarse el gimnasio en un día.

Para evitar las lesiones:

• Calienta. Personalmente es algo que me parece horrible, siento que ese tiempo de calentamiento podría usarlo para entrenar fuerte, pero después de un par de lesiones aprendí mi lección. NUNCA te saltes el calentamiento es básico para que los músculos se estiren y preparen para el trabajo. Dependiendo del grupo muscular que vas a trabajar es el tipo de calentamiento que vas a realizar. Ejemplo, si vas a entrenar pecho y espalda, no sirve de nada calentar 15 minutos en bicicleta estática, puedes realizar una serie del ejercicio que vas a realizar con muy poco peso o sin él.

• Estírate. Los estiramientos son básico en el entrenamiento, desgraciadamente todos le restamos importancia, terminamos de entrenar y lo último que queremos es pasar 10 minutos más en el gimnasio, pero ¡es fundamental estirarnos antes y después del entrenamiento! previene lesiones y favorece la flexibilidad de nuestras fibras musculares.

• Cuida tus movimientos. Aunque en repetidas ocasiones mencioné lo importante de las ejecuciones, hablando de lesiones se vuelve importantísimo. Cuando ejecutamos mal y estamos usando peso, otros músculos entran a darnos estabilidad y podemos estar forzándolos demasiado, ejemplo: Estas realizando sentadillas con peso considerable, tu postura no es la correcta, la ejecución es rápida y haces un movimiento como “aventar”, el peso que debía ser tolerado por tu tren inferior será soportado por tu espalda, especialmente los lumbares, la lesión es casi inevitable.Yo siempre recomiendo bajar los pesos y poner más atención en la ejecución, como lo   he mencionado antes, una ejecución limpia te dará mejores resultados que muchas repeticiones mal hechas con mucho peso.

• Planea tu entrenamiento. Las personas que llegan al gimnasio con una rutina, sabiendo exactamente lo que van a hacer en cada visita son las que tienen menos probabilidades de lesión.

Suponiendo que esta nota llegó un poco tarde a tu vida y de momento te encuentras recuperándote de una lesión, sólo me queda decir: descansa, yo se que es horrible no poder entrenar por una lesión, pero el descanso es básico para tu recuperación. No desobedezcas las instrucciones de tu médico, hasta que él te de luz verde para volver a entrenar, podrás hacerlo. Si decides volver a entrenar antes de tiempo, lo único que lograrás es empeorar la lesión y pasar más tiempo en recuperación.

En mi muy personal opinión el uso de faja para cargar pesos sólo es recomendable cuando mueves pesos muy grandes, las personas que levantamos pesos pequeños o moderados no necesitamos faja, el uso de faja hace “flojos” nuestros lumbares, como siempre sienten soporte, no necesitan desarrollarse; así que volvemos a lo mismo, reduce pesos y realiza ejecuciones limpias.

Por último, si al entrenar sientes dolor, tirones o algo que no consideres “normal” en ese momento detén tu entrenamiento, de ser posible estírate y ve a descansar. Pon atención a tu molestia y acude al médico.

Nota por Kika Gomar.  Twitter: @Kikagomar