Celebra los increíbles sabores de la comida mexicana con estas 5 recetas que son perfectas para compartir.

La comida mexicana es patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por una muy buena razón: tenemos una inmensa variedad de platillos llenos de sabor, historia y amor.

Aprovecha este mes patrio para preparar y compartir con tus seres queridos un extraordinario menú de recetas mexicanas tradicionales muy fáciles de hacer.

• Unas irresistibles enchiladas

Las enchiladas son uno de los platillos típicos mexicanos que se pueden encontrar en toda la república. Se elaboran con tortilla bañada en una salsa que puede ser o no picosa.

Este platillo tiene origen en las civilizaciones precolombinas, aunque sus variaciones han surgido a través de los años en distintas regiones del país.

¿Sabías que se cree que las enchiladas suizas se crearon en un restaurante de la Ciudad de México para ayudar a que un cliente frecuente suizo aguantara el picor de las enchiladas?

Dependiendo de sus ingredientes, las enchiladas pueden tener una base, relleno y salsa diferente. Sin embargo, no importa con que se preparen todas son igual de deliciosas. Algunas de las enchiladas más famosas son las rojas, verdes, suizas y mineras.

• El emblemático chile relleno

El chile relleno es un platillo tradicional mexicano que no puede faltar en la mesa. Consiste en un chile relleno de queso, picadillo u algún otro ingrediente, que se sirve capeado o no, bañado con una salsa.

El chile más común para este platillo es el chile poblano, sin embargo, el chile relleno puede llevar diferentes ingredientes dependiendo de la región del país del cual proviene.

Existe una gran cantidad de recetas diferentes, pero igual de sabrosas. Prueba nuestra receta de chile relleno de picadillo capeado con claras de Huevo San Juan, es una deliciosa manera de disfrutar de nuestras tradiciones mexicanas.

Aquí te dejamos algunos tips para que el capeado te quede perfecto: //www.instagram.com/p/CFknjmTjVbV/?utm_source=ig_web_copy_link

• Los papadzules, una delicia del sur

¿Habías escuchado de los papadzules? Es un platillo tradicional de la gastronomía de la península de Yucatán. Su origen es maya y su nombre significa "el alimento del amo" o "embarrado y mojado".

Los papadzules se preparaban desde tiempos prehispánicos, y hoy en día siguen siendo un platillo sencillo de preparar, pero único y delicioso.

Consiste en tortillas de maíz rellenas de huevo cocido, bañadas en salsa verde de pepita de calabaza y salsa de tomate. Prepara tus propios papadzules con Huevo San Juan, mira la receta: //www.instagram.com/p/B2pgwpHAsDP/?utm_source=ig_web_copy_link

• Unos asombrosos chilaquiles con mole

Los chilaquiles son uno de los platillos mexicanos consentidos por su versatilidad e increíble sabor. Aunque desconocemos su origen exacto, sí sabemos que su nombre proviene del náhuatl chil (chile) y aquili (estar dentro de algo), dándole el significado de sumergido en chile.

El platillo consiste en totopos bañados en salsa, acompañados con crema, queso y cebolla. Hay muchas variaciones del platillo ya que la salsa con la que se baña puede ser muy diferente, desde la tradicional salsa roja hasta una salsa de flor de calabazaTambién se le pueden añadir infinidad de proteínas como huevo, carne asada o pollo.

Prueba nuestra deliciosa receta de chilaquiles enmolados con huevo frito, un platillo que combina dos delicias mexicanas: el mole y los chilaquiles. ¡No te la puedes perder!

Además, te recomendamos probar estas otras increíbles recetas:

Una clásica de torta de chilaquiles con huevo
Para un buen desayuno, unos molletes de chilaquiles con huevo estrellado

• Para el postre: una jericalla

Una buena comida no puede terminar sin un dulce final. La jericalla es un postre típico mexicano que se asemeja al flan, pero que proviene de Jalisco. Es un platillo que mezcla ingredientes mexicanos y europeos; huevo, azúcar, canela y vainilla.

La historia más popular de su origen cuenta que una monja quien cocinaba para los niños huérfanos del Hospicio Cabañas tomó los ingredientes del postre, los mezcló y los puso a hornear.

Al tener que servir a tantos niños se le olvidó el postre en el horno y a la hora de sacarlo notó que la parte de arriba se había quemado. Es así como nace la famosa jericalla, ligera por dentro con un toque de sabor dorado en la parte superior.

Prepara esta delicia tapatía con Huevo San Juan, una receta que a todo mundo le asombrará.

¡A cocinar se ha dicho!

Ya que conoces las increíbles historias detrás de estos típicos platillos mexicanos es hora de preparar cada uno para compartirlo con tu familia y amigos.

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