Existen personas que padecen algún tipo de adicción y les está yendo bien con el encierro, al grado de que no solo logran disminuir su consumo, sino incluso anularlo, debido a la disminución del contacto con otros, lo que los hace sentir menos juzgados, observados o criticados.

Si a esto le sumamos un ambiente tranquilo y amoroso en casa, el efecto tranquilizador es aún mayor.

“La dependencia que se produce hacia alguna sustancia o acción por lo general surge de una necesidad imperante por evadir algo que no nos gusta de la realidad o incluso muchas veces por tener la aceptación de alguien más. Lo que nosotros ofrecemos es la posibilidad de encontrar la mejor versión de uno mismo brindándoles programas personalizados para superar cualquier tipo de adicción como puede ser alcoholismo, ludopatía, codependencia, drogadicción, entre otras, de forma presencial o virtual”, dijo Reyna Khabie Romano, directora General de Emotion Life Center.

Adicciones y Covid 19

La especialista señaló que algunos factores que inciden positivamente en la disminución de una adicción son:

- Los factores de protección.
- El aumento de habilidades para la vida.
- Redes de apoyo.

Mientras que, de acuerdo con un estudio sobre recaídas, tres puntos claves para no reincidir son:

- Enfrentamiento exitoso a situaciones de riesgo sin consumo lo que genera una sensación de autoeficacia.
- Mantenerse en revisión constante o asistir a un grupo.
- Formar o mejorar las relaciones interpersonales.

Sugirió que, a quienes padecen una adicción y aún permanecen en confinamiento, mantengan "una rutina que involucre tiempo para hacer ejercicio, dormir y comer balanceadamente; siendo lo más importante buscar un espacio ya sea profesional o de ayuda mutua donde la persona pueda manifestar, entender, gestionar y canalizar sus emociones ligadas al consumo de sustancias".

Adicciones y crisis

Finalmente, y previendo que existe población vulnerable a incrementar su consumo de alcohol o tabaco durante la pandemia por Covid 19, dijo que "es un fenómeno que se ha observado en el manejo de las crisis en la historia de la humanidad, no por ello significa que sea normal o saludable, es una oportunidad de que cada persona busque ayuda para aprender a manejar lo que está sintiendo, y también es una oportunidad como sociedad para observar y cambiar cómo es que culturalmente manejamos estas crisis".

Elizabeth Santana | El Sol de México